Como fue recibido por
Marshall Vian Summers
el junio 6, 2008

Parte de las Grandes Olas de cambio para la humanidad es el hecho de tener que enfrentar la realidad de que no está sola en el universo y ni siquiera dentro de su propio mundo. Porque fuerzas expedicionarias de la Comunidad Mayor, del universo físico, están en el mundo hoy y han estado aquí por algún tiempo —interfiriendo en los asuntos humanos, manipulando la percepción humana, promoviendo los conflictos humanos, actuando clandestinamente detrás de las escenas, tomando a personas en contra de su voluntad y sometiéndolas a experimentos a menudo terribles, modificando sus mentes para que apoyen esta Intervención y sean leales a ella.

Mientras has estado viviendo tu vida en circunstancias normales, grandes cosas han estado sucediendo entre bambalinas, cosas de las que el público no tiene ni idea. Y aunque muchas personas han visto naves volando en sus cielos y se han reportado innumerables avistamientos, el misterio de esta presencia en vuestro mundo ha permanecido encubierto, entre bastidores, fuera de la vista del público.

Muchos de vuestros gobiernos han hecho un gran esfuerzo para desalentar cualquier investigación sobre el tema, creando un velo de secreto y ridículo que ha desalentado muy eficazmente la conversación y la conciencia públicas de este gran encuentro, de este gran desafío para la libertad humana. Ningún gobierno admitirá a su gente que se enfrenta a un adversario para el que no tiene una respuesta adecuada.

Así que el misterio de esto ha sido cubierto ahora por la mentira y el engaño. La gente ha sido alentada a creer en cosas fantásticas sobre la presencia extraterrestre en el mundo, pensando que se trata de una fantasía o que representa una especie de historia maravillosa del pasado. Esto está ahora tan envuelto en medias verdades, engaños, ridículo y fantasías, que incluso las personas que han reconocido una presencia extranjera en el mundo no pueden pensar con claridad al respecto. Se ha creado mucha confusión en el tema, enturbiándolo, torciéndolo y modificándolo en gran medida. Algunas personas incluso han sido alentadas por los gobiernos a contar historias fantásticas y disparatadas, para desacreditar a cualquiera que pudiera tratar de presentar algo verdadero o real o intentara generar una conversación honesta —un debate, una conversación, una conciencia públicas.

En este momento en que las Grandes Olas están comenzando a emerger, han llegado al mundo otras fuerzas, competidores del universo. Ellos no vienen con armas. No vienen con una armada de naves. Vienen con el poder de la persuasión y el engaño. Su tecnología es avanzada, pero confían especialmente en su capacidad para influir en las mentes de los que viven aquí. En esta Comunidad Mayor de vida inteligente en el universo, la guerra como se la conoce en este mundo es en realidad mucho más inusual de lo que podrías imaginar. Se han encontrado otras formas para superar a los rivales: trucos, engaños, manipulaciones, proyecciones y poder en el ambiente mental —un ambiente del que la humanidad no sabe casi nada.

Aunque la influencia se intenta en cada hogar y en cada nación, la influencia en la Comunidad Mayor ha alcanzado demostraciones mucho más grandes y sutiles, y es también mucho más poderosa. Aquellas razas que están intentando acceder al mundo quieren conservar sus recursos. Ellas ven a la humanidad como uno de los recursos. No están aquí para destruiros, sino para utilizaros: para utilizar vuestra inteligencia y vuestra fuerza, para utilizaros a su servicio. Y se tomarán el tiempo que sea necesario, utilizando medios muy sutiles para lograr este fin.

El mundo es muy valioso. Es muy rico biológicamente y tiene una gran e importante posición estratégica. La humanidad no se da cuenta del gran premio que es este mundo y de cuánto es valorado por aquellas pocas razas que son conscientes de él y lo buscan para sí mismas. Ellas competirán por él, pero usarán medios y tácticas similares.

Tratarán de debilitar a las naciones más fuertes involucrándolas en conflictos sin solución, fomentando el uso excesivo de los recursos del mundo, recursos que ellas mismas no necesitan. Extenderán el descontento. Promoverán la idea de que el liderazgo humano no puede salvar al mundo, que la humanidad es esencialmente destructiva y que solo un poder extranjero —solo el poder de la Intervención— puede salvar a la humanidad de sí misma, de destruirse a sí misma, de destruir su mundo y de sucumbir a las Grandes Olas de cambio.

Ahora la humanidad tiene competidores de más allá del mundo. No son guerreros. No os conquistarán por la fuerza. Sus poderes son sutiles pero muy eficaces en un mundo donde la gente está dividida y en conflicto entre sí, un mundo donde la gente ignora las realidades y exigencias de la vida en el universo a su alrededor, un mundo donde la gente es supersticiosa, un mundo donde la gente todavía no ha aprendido a confiar en el Conocimiento más profundo que Dios ha puesto en su interior.

Todo esto hace que la humanidad sea vulnerable a la persuasión y la manipulación. Y si bien la intervención tratará de permanecer oculta y fuera de la vista de la mayoría de la gente en el mundo, aquellos que son conscientes de su presencia serán influenciados. Muchos serán tomados y sus mentes serán tornadas hacia la Intervención. Muchos serán utilizados para experimentos de reproducción. Muchos serán tomados y nunca devueltos a este mundo.

Esto es tan fantástico, tan increíble, que la gente apenas puede creer que algo así pueda suceder. Sin embargo, la gente ha olvidado que forma parte de la naturaleza, que la competencia y la intervención son parte de la naturaleza, que las especies tratan de competir entre sí por el entorno y los recursos. La humanidad ha alcanzado una posición de poder y ha desarrollado una infraestructura en todo el mundo que las razas extranjeras pueden utilizar. La humanidad se enfrenta a las Grandes Olas de cambio. Por tanto, es especialmente vulnerable a la clase de influencia y persuasión que se presentará aquí.

La gente dirá: «Esto es increíble. No me lo creo». Pero debes preguntarte: ¿quién ha estado volando en vuestros cielos desde hace muchas décadas? ¿Quién ha estado produciendo pánico entre vuestros gobiernos desde hace muchas décadas? ¿Y por qué las naciones actuarían tan tontamente, sobrepasando sus recursos e involucrándose en conflictos con otros, conflictos que no pueden ganar? Quizá digas que es por la codicia y la estupidez humana, pero eso no es suficiente. Porque la humanidad se encuentra en un gran punto de inflexión, un punto de inflexión que la llevará a su declive permanente o bien a su futura ascensión como una raza unida y poderosa.

Es en este gran umbral que algunas razas ejercerán su influencia, porque los recursos del mundo son valiosos y porque estas fuerzas ven a la humanidad como un recurso. Con mucho cuidado se promoverá un cambio en la autoridad y una dependencia del poder extranjero, de la tecnología extranjera. Al mismo tiempo, la Intervención se presentará como una fuerza benigna y edificante para las pocas personas que han tomado conciencia de ella, y especialmente para aquellas que han caído bajo su influencia.

Esto complica la situación de la humanidad. En efecto, crea una gran barrera para el reconocimiento de las personas. Se ha plantado ahora tanta confusión, engaño y ridículo en la conciencia humana que las personas —especialmente en los países más ricos— tienen miedo hasta de pensar en estas cosas, creyendo que si lo hacen serán tontas o parecerán tontas a los demás.

Es por eso que ahora debe darse un Nuevo Mensaje, porque la humanidad está en el punto de inflexión que determinará si será una civilización fracasada, una raza fracasada en un mundo que con el tiempo se verá sometido al poder y la dominación extranjeros, o si ejercerá su mayor inteligencia y su mayor poder para llegar a ser una raza unida y libre dentro de una Comunidad Mayor de vida inteligente en el universo.

Debes ver que la humanidad es el pueblo originario de este mundo y aprender las lecciones de las intervenciones [humanas en el pasado]. Aprende las lecciones que te enseña lo sucedido con los pueblos indígenas cuando estos se encontraron con fuerzas de más allá de su conciencia, fuerzas mostrando una tecnología diferente y quizás mayor, fuerzas que no comprendían, fuerzas que erróneamente interpretaron como algún tipo de entidades o emisarios espirituales.

La historia te cuenta cómo grandes civilizaciones han capitulado ante pequeños grupos de invasores inteligentes y engañosos. Esto se ha demostrado una y otra vez en la historia del mundo, especialmente en la historia reciente. Incluso en la actualidad, naciones y culturas enteras están cayendo bajo la persuasión de potencias extranjeras por su dependencia de la tecnología extranjera y por la persuasión de la propia Intervención.

Ahora, toda la humanidad se enfrenta a esto. Ahora, toda la humanidad representa los pueblos nativos de este mundo, que enfrentan la intervención de pequeñas fuerzas expedicionarias que están aquí para tornar a la humanidad contra sí misma, para ganar influencia, para conseguir el dominio, para unirse con personas psicológica y emocionalmente y, en algunos casos, incluso biológicamente. De este modo, la humanidad podría ser conquistada sin ningún signo de violencia abierta. Así es como una raza más inteligente y unida toma el control de una raza mucho mayor en número, pero más débil y dividida.

La humanidad se enfrenta ahora a habilidades que aún no ha cultivado. Se enfrenta ahora a un engaño que es doblemente difícil de discernir, debido a las intenciones de la Intervención de engañarla y debido a la dificultad y la confusión que los propios seres humanos han sembrado alrededor de este fundamental y trascendente evento.

El Creador de toda vida no permitirá que la humanidad sea conquistada sin más a través del engaño, la astucia y la manipulación sin hacer una gran advertencia. El Nuevo Mensaje ha dado esta advertencia. Incluso ha llamado a los aliados potenciales de la humanidad en el universo para que envíen espías a observar esta Intervención y [os] entreguen su informe. Estos espías nunca han visitado la Tierra, pero han sido testigos de la Intervención y han enviado su informe en la serie de Discursos de los Aliados de la Humanidad. No sabéis quiénes son estas razas, pero su testimonio es esencial para vuestro desarrollo y vuestra preparación para la Comunidad Mayor.

Al unir todas estas piezas, la imagen se vuelve muy clara. La familia humana enfrenta ahora dificultades ante un mundo en decadencia, ante un mundo con recursos en declive, ante el riesgo cada vez mayor de competencia, conflicto y guerra entre sus naciones y pueblos divididos. A esto se añade la llegada de competidores que buscan usar estas situaciones a su favor y aprovecharse de la debilidad, la superstición y el conflicto humanos.

Si pudieras contemplar la historia de la humanidad, en particular su historia reciente, allí donde se han usado otras alternativas a la fuerza para obtener el control de otras naciones y pueblos, verías que hoy la Intervención está siguiendo un patrón muy familiar. Es solo que la humanidad no está acostumbrada a estar en esta posición. Se cree predominante. Se cree poderosa. No reconoce que otra raza podría venir y aprovecharse de sus debilidades, sus conflictos y sus supersticiones.

Todas estas circunstancias trabajan ahora en vuestra contra, y es por eso que un Nuevo Mensaje ha sido enviado al mundo para advertir y preparar a la humanidad para las Grandes Olas de cambio y para la realidad del encuentro con una Comunidad Mayor de vida inteligente.

La gente no sabe nada sobre la vida en el universo, y es por eso que este tipo de educación es tan fundamental y esencial. Incluso vuestros grandes científicos creen que todo el que viniera a visitaros quedaría fascinado con la humanidad, deseando compartir su ciencia y su tecnología y deseando ayudar a la humanidad. Y sin embargo, en realidad las primeras razas que encontraréis directamente serán exploradores de recursos y colectivos económicos, aquellos que están aquí para sacar partido de una inmensa oportunidad y que se aprovecharán de vuestro lugar en la historia, de vuestras circunstancias, de vuestras tendencias y de vuestra ignorancia.

Esta advertencia sobre la Intervención debe formar parte ahora de vuestra educación, de lo contrario subestimaréis el poder de la época en la que vivís. Subestimaréis el poder y los peligros de las Grandes Olas de cambio y cómo otros que no reconoces pueden utilizar estas Grandes Olas contra la humanidad.

Estos visitantes del mundo no son seres multidimensionales. No son del mundo espiritual. No son ángeles ni demonios. Son seres físicos como vosotros, impulsados por las mismas necesidades que impulsan a la humanidad —la necesidad de recursos, la necesidad de control, la necesidad de riqueza, la necesidad de estabilidad.

No hay nadie en el mundo que pueda educaros sobre la Comunidad Mayor ni ofreceros sabiduría de la Comunidad Mayor. Esto realmente debe venir de Dios. Parte de esta preparación debe provenir de las pocas razas que son conscientes de la humanidad, de aquellos que podrían ser vuestros futuros aliados, porque su testimonio es crucial para vuestra comprensión. En la naturaleza mayor de las cosas, las razas avanzadas y exitosas deben transmitir su sabiduría a los mundos emergentes como el vuestro, y deben hacerlo sin llegar a interferir en esos mundos.

Esto representa una mayor tradición en el universo de lo que todavía sois conscientes. Pero ahora sois los beneficiarios de ella, y tal regalo de sabiduría debe darse sin manipulación ni intervención. Es por eso que las razas que están interviniendo hoy en el mundo representan a aquellos que buscan aprovecharse de una humanidad débil y dividida.

Debéis tener mucha fuerza para enfrentar esto. Debéis ser capaces de reunir en vuestro interior el coraje para enfrentarlo. Si os equivocáis aquí, si no reconocéis vuestra situación y vuestra oposición, entonces cometeréis un error grave y quizá fatal. Es por eso que este regalo de Dios, este regalo de profundo amor y respeto por la humanidad, debe darse con gran urgencia y seriedad.

No os dais cuenta del premio en el que la humanidad está viviendo, este hermoso mundo, ni de lo raros que son mundos así en el universo, ni de cómo las naciones tecnológicamente avanzadas han sobrepasado sus mundos originarios y ahora deben viajar buscando recursos. De hecho, esto no es un misterio. Forma parte de la naturaleza, la naturaleza que podéis comprender. La historia del universo no es tan diferente de la historia de vuestro mundo, donde los fuertes dominan a los débiles si pueden.

Es por eso que no podéis ser complacientes. No podéis ser estúpidos y autoindulgentes. No podéis ser perezosos e indolentes, ni frente a las Grandes Olas de cambio ni frente a esta Intervención de la Comunidad Mayor en la que la humanidad vive.

Esta representa la gran advertencia que el Nuevo Mensaje está proporcionando. Pero el Nuevo Mensaje ofrece una bendición y una preparación, porque la humanidad tiene el poder para contrarrestar esta Intervención y enfrentar y navegar los tiempos difíciles que se avecinan en vuestro mundo.

La humanidad ha sembrado las semillas de su propia destrucción por el mal uso y el abuso del mundo, pero esto puede ser mitigado en gran medida, y la adaptación puede ocurrir. Pero para hacer esto, la humanidad tendrá que unirse. Tendrá que poner fin a sus conflictos incesantes, prepararse para enfrentar un mundo en declive y prepararse para hacer frente a la competencia de la Comunidad Mayor.

Aquí estos tiempos tienen el poder de derrotaros, o bien de uniros y elevaros. La decisión no descansa solo en los gobiernos, sino en cada persona: en su capacidad para enfrentar el cambio, para responder al cambio, para prepararse para el cambio, para adaptarse al cambio y para unirse en nombre de la seguridad mutua. Porque ahora el énfasis no debe estar en la seguridad nacional de una sola nación, sino en la seguridad del mundo entero.

Intervenciones como la que enfrentáis ahora continuarán, porque sois una raza débil y dividida viviendo en un planeta hermoso. Esto atraerá aquí a otros que intentarán, principalmente a través de la persuasión y el engaño, influenciar a la humanidad para que se una a ellos, se vuelva dependiente de ellos y confíe en ellos. Estas tendencias no cesarán aunque esta intervención se frustre.

Sois como la chica joven entrando en la gran ciudad, pensando que todo el mundo será su amigo, sin tener idea de cómo podría ser explotada y utilizada y de las innumerables persuasiones a las que puede ser sometida para que consienta, para que se entregue. Esta es la complejidad y el reto de vivir en la realidad física.

Pero Dios os ha dado [a ti y a todos aquí] un Conocimiento más profundo que no puede ser manipulado ni persuadido y que no puede caer bajo ningún tipo de persuasión, ya sea su origen humano o de más allá del mundo. El Conocimiento dentro de vosotros solo responde a Dios y al Conocimiento en los demás. No puede ser manipulado ni persuadido, y es por eso que representa vuestra mayor fuerza —vuestra fuerza central, el aspecto más fiable de vosotros—. Es por eso que el Conocimiento y el surgimiento del Conocimiento tendrán un papel clave en la determinación del resultado para la humanidad, el cual en este momento permanece incierto y por resolver. El Conocimiento es la fuerza más poderosa en el universo y la Intervención no lo está utilizando, de lo contrario no estaría interviniendo aquí.

La humanidad tiene una rica herencia espiritual a pesar de sus muchos errores. No os dais cuenta de qué gran ventaja tenéis en estos encuentros iniciales con la vida en el universo. No os dais cuenta de vuestros puntos fuertes. Son vuestros puntos débiles los que serán explotados por esta intervención y por las futuras intervenciones. Es por eso que vuestra fuerza debe ser alentada, debe ser revelada y debe ser compartida, reconocida y aplicada. Eso es lo que el Nuevo Mensaje enfatiza.

La humanidad no sabe cómo prepararse para la Comunidad Mayor. No hay nadie en el mundo que sepa cómo hacerlo. Solo una potencia extranjera o Dios pueden enseñaros esto. Sin embargo, una potencia extranjera sería poco probable que lo hiciera, a menos que tuviera un interés especial aquí, a menos que tuviera sus propios propósitos. Así que el mensaje debe venir de Dios. Los Aliados que han enviado su sabiduría no intervendrán. Porque la verdad es que la humanidad no está preparada para encontrarse con razas beneficiosas en el universo. No tenéis la unidad. No tenéis el poder. No tenéis el discernimiento ni la sabiduría. Y todavía no tenéis la discreción.

Un contacto real y beneficioso con la vida en el universo no puede suceder hasta que la humanidad haya enfrentado y superado las Grandes Olas de cambio. Pero mientras tanto, otros tratarán de intervenir para aprovechar la incertidumbre y los conflictos crecientes de la humanidad, incertidumbre y conflictos que pueden generar las propias Grandes Olas de cambio.

No caigas en la trampa de pensar que esto va sobre el amor o el miedo. Ese es un discernimiento necio. Va sobre la sabiduría o la falta de sabiduría. Va sobre la responsabilidad o la irresponsabilidad. Va sobre ver la verdad o no ver la verdad. Va sobre responder a la realidad o no responder a la realidad.

Tarde o temprano, tendrás que superar tu miedo para ganar una mayor fuerza y una mayor objetividad. Pero esa es la meta. Para llegar a esa posición de claridad y fuerza, debes enfrentar el gran umbral que toda la humanidad está enfrentando ahora. Debes prepararte para este umbral y debes superar tus fantasías infantiles y tus tontas distracciones.

Particularmente en los países ricos, las personas que se han acostumbrado a perderse en sus placeres, sus aficiones y sus adicciones deben despertar ahora a la realidad de que su preeminencia en el mundo está siendo desafiada y de que la propia Tierra no será capaz de proporcionarles lo que están acostumbradas a recibir de ella.

Las personas más pobres del mundo comprenden la privación. Comprenden la intervención. Comprenden la manipulación, ya que han estado experimentándola y sufriéndola durante mucho tiempo. Son las personas ricas quienes son ignorantes, quienes están ciegas. Son ellas quienes deben aportar las fortalezas de la humanidad. Son ellas quienes deben unir las naciones para preservar la libertad y la soberanía humanas en este mundo y para asegurar que la civilización humana no se desmorone bajo el peso y la fuerza de las Grandes Olas de cambio.

Debes escuchar el poder de este mensaje. Debes tener fuerza en tu corazón. Debes tener coraje. Si huyes no hallarás lugar donde esconderte, y solo debilitarás tu posición, haciéndola más vulnerable en el futuro. El tiempo ahora es esencial —el tiempo para ver, para saber, para prepararte y para fomentar la unidad y la libertad humanas—. Haces esto no solo por el valor que tiene por sí mismo, sino para asegurar la capacidad de la humanidad para hacer frente a las Grandes Olas de cambio y a una Intervención que hasta hoy está operando con muy poca conciencia y resistencia humanas.

No pienses que una potencia extranjera vendrá aquí para tratar de ayudaros sin querer algo de vosotros. No pienses que una potencia extranjera se implicaría con la humanidad y sus circunstancias difíciles, gastando tanta riqueza y energía, a menos que tuviera un gran motivo secreto. La historia te enseña que las intervenciones se realizan siempre por el interés propio y que las razas que se enfrentan a dichas intervenciones, en caso de sucumbir, serán devastadas y, en algunos casos, destruidas por completo.

Has visto esto en la historia de la humanidad. Es algo conocido en vuestro mundo. Forma parte de vuestra experiencia de la vida y la naturaleza. Debes ser realista. Debes ser honesto. La situación no es tan confusa como piensas. La nube de confusión es perpetrada tanto por fuerzas humanas como extraterrestres que buscan mantener a la humanidad al margen, que quieren mantener a la humanidad dividida, débil y sin capacidad de respuesta. Pero el cuadro puede verse fácilmente si tienes el valor de ver y tienes la información y la comprensión correctas.

Sin embargo, esta Intervención crea un ambiente engañoso. Tiene muchos aliados humanos que ahora forman parte de su engaño, que hablarán de la gran presencia extraterrestre, de sus regalos tecnológicos y de su promesa para el futuro de la humanidad. Ten mucho cuidado ahora. Ten mucho cuidado y usa el discernimiento. No caigas bajo persuasiones perpetradas por poderes que nunca han revelado su verdadero propósito e intención, que están operando aquí en secreto, que están involucrados en muchas actividades, muchas de las cuales son nefastas en su naturaleza. Reserva tu juicio hasta que puedas aprender y ver con más claridad.

La bendición que el Nuevo Mensaje está presentando es el reconocimiento y la garantía de que la humanidad tiene un poder mayor, el poder del Conocimiento. La humanidad tiene una larga tradición religiosa y espiritual que, a pesar de sus muchos errores, ha mantenido viva la capacidad de la humanidad para seguir al Conocimiento y ha mantenido vivos el dar y la compasión en este mundo, mientras que estas cosas han fracasado en muchos otros mundos.

La humanidad tiene grandes fortalezas y una gran promesa. La religión y la espiritualidad siguen vivas aquí, en contraste con otras sociedades altamente tecnológicas donde ambas han muerto. En este aspecto tenéis un regalo que dar al universo. Pero primero debéis sobrevivir a las Grandes Olas de cambio, y debéis sobrevivir a estos primeros intentos de intervenir en el mundo.

Debéis uniros, debéis ser autosuficientes y debéis ser muy discretos. Estos son los tres requisitos de cualquier mundo o asociación de mundos para determinar si serán libres y autodeterminados en un universo lleno de grandes persuasiones, en un universo donde la competencia se lleva a cabo a una escala que ni siquiera podéis imaginar.

Ya es hora de que la humanidad madure, se una y se fortalezca. Ya es hora de que la humanidad deje de ser una administradora débil y dividida de un hermoso planeta y se fortalezca y se una para preservar el mundo y preservar y fomentar en él la libertad y la soberanía humanas.

Dios os ha dado este mundo para proporcionaros todo lo necesario. En caso de agotar vuestra herencia natural, tendréis que pedir lo que necesitáis a otros poderes en el universo. Si esto ocurre, perderéis gran parte de vuestra libertad y autodeterminación, pasando a ser un estado cliente de potencias extranjeras, las cuales no dudarán en aprovecharse de vuestra posición debilitada y dependiente.

Este regalo es un regalo de amor. Es un regalo que viene con gran urgencia. Llama a un mayor Conocimiento y sobriedad en tu interior. Tu intelecto —tu pensamiento, la mente personal que ha sido tan condicionada por el mundo— puede argumentar en contra de esto, enfrentarlo, rechazarlo, negarlo, puede tratar de compararlo con otras cosas o puede tratar de unirlo con otras cosas. Sin embargo, esta comunicación se dirige a una parte más profunda de ti, la parte de ti que no puede ser engañada y no es necia, la parte de ti que es fuerte y naturalmente compasiva, la parte de ti que está unida y es capaz de unirse con otros.

La humanidad tiene la gran promesa de convertirse en una raza libre que progresa en el universo. Pero, para lograrlo, debe hacer frente a los resultados de su propio mal uso del mundo. Debe unirse, debe ser fuerte, y debe cuidar de este mundo para que su autonomía pueda mantenerse en el futuro.

Solo si podéis lograr esto será posible un contacto beneficioso con otras razas. E incluso en ese caso, tendréis que ejercer mucho discernimiento y discreción. Porque la libertad en el universo es infrecuente. Las razas libres y autodeterminadas en el universo son infrecuentes. En esto no os dais cuenta de las grandes ventajas que ya poseéis en la limitada libertad que habéis sido capaces de establecer en este mundo, y cuánto beneficio ha producido esto para la humanidad.

Este es el mundo que has venido a servir. Puede que no sea lo que querrías que fuera, pero es adecuado para aquello por lo que estás realmente aquí, porque has venido con un propósito y una misión más grandes. Has venido a hacer contribuciones específicas al mundo, en concierto con ciertas personas. Esto representa tu mayor propósito, no el propósito que crea tu imaginación o que enfatiza tu sociedad, sino el propósito mayor que nace de tu unión con Dios.

Has venido al mundo a enfrentar las Grandes Olas de cambio y la Intervención. Este es el mundo que has venido a servir. Si no puedes reconocerlo, si no puedes enfrentarlo, entonces tu servicio nunca será valorado y nunca será prestado. Por tanto, el primer gran umbral es enfrentar el gran umbral. Y es por eso que se te da ahora este Mensaje, esta preparación para la Comunidad Mayor y para las Grandes Olas de cambio.