
Marshall Vian Summers
en julio 21, 2007
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La humanidad y el mundo se encuentran en el umbral del mayor cambio que jamás enfrentarán. Lo que producirá este cambio será en parte el mal uso del mundo por la humanidad y el impacto de la humanidad en el medioambiente del planeta. Pero este cambio, también incluye la Intervención de razas de más allá del mundo que buscan aprovecharse de una humanidad débil y dividida.
Estos dos grandes eventos, estos dos grandes fenómenos, están directamente conectados. Porque aquellos que buscan intervenir en el mundo pretenden que la humanidad se debilite, se divida y se hunda en el conflicto —que vuestras naciones luchen por los recursos remanentes, que vuestras naciones se peleen entre sí por los derechos y el acceso a la comida, el agua y la energía.
En una situación cada vez más caótica, aquellos que buscan intervenir en el mundo y que dependen ante todo de la persuasión en el ambiente mental para lograr sus objetivos, se presentarán como los salvadores de la humanidad. Vendrán con su tecnología avanzada, proclamando que no padecen guerras ni conflictos y que han aprendido a vivir en paz y ecuanimidad.
Pero su presentación, por más convincente que pueda parecer, es enteramente un engaño. Porque ellos no son más que exploradores de recursos y de intereses comerciales que buscan ganar el control del mundo y de su gente.
Ellos no poseen poder militar. No es ahí donde reside su poder. No tienen grandes ejércitos y no van a venir a tomar el mundo a la fuerza, pues no pueden hacer eso. En cambio, su fortaleza es más sutil, penetrante y, a la larga, mucho más exitosa de lo que sería cualquier uso de la fuerza física.
El destino de la humanidad es emerger a una Comunidad Mayor de vida inteligente en el universo. La Comunidad Mayor representa razas y naciones de seres en todos los niveles de evolución, abarcando una inmensa diversidad de vida. Pero en el presente, la humanidad no sabe nada de la Comunidad Mayor. Solo tenéis vuestros deseos, vuestros miedos y vuestras aspiraciones para responder a la gran pregunta de qué es lo que existe más allá de vuestras fronteras.
Lo que existe más allá de vuestras fronteras es un ambiente competitivo, diferente a todo lo que puedas imaginar. En él hay razas que son maduras. Hay razas que han aprendido a obtener lo que necesitan sin usar las armas y la fuerza, tras entender que la fuerza y el poder de la mente en el ambiente mental son mucho más efectivos y constructivos que tratar de influir usando armamentos o la fuerza física.
La humanidad solo tiene un atisbo de lo que puede ser este gran poder, y tú [también] sin duda conoces este gran poder. Es el poder y la influencia en el ambiente mental. En su forma más simple está representado por la influencia de un padre sobre sus hijos, o por la influencia de un gobierno sobre su pueblo, o por la influencia de un comerciante sobre sus clientes. Se trata de intentar persuadir a las personas para que ellas hagan lo que tú quieres que hagan, y para que no hagan lo que tú no quieres que hagan; se trata de inducirlas a que sean dóciles, pacificándolas, dirigiéndolas y controlándolas.
Aunque esta influencia en el ambiente mental tiene aplicaciones muy positivas, lo que la humanidad está enfrentando en la Comunidad Mayor constituye la máxima amenaza a la libertad y a la soberanía humanas en este mundo. Esta amenaza es aún mayor que la del declive en el medioambiente y el desperdicio de vuestros recursos. Aunque estas cosas van a tener consecuencias inmensas en la calidad y la cantidad de vida dentro de la familia humana, el hecho de enfrentar intervenciones desde fuera del mundo tiene consecuencias mucho mayores para el futuro y el destino de la familia humana.
En el presente, hasta las personas más instruidas siguen pensando que la humanidad vive aislada, creen que quizá haya vida inteligente en algún lugar del universo, pero asumen que nadie puede llegar hasta aquí, como si el universo entero estuviera limitado por las fronteras de la ciencia y el entendimiento humanos.
De hecho, habéis vivido en aislamiento por tanto tiempo que este representa el contexto entero del entendimiento de vosotros mismos —el contexto de vuestras filosofías, vuestras religiones, vuestras teologías y vuestras estructuras sociales.
Así pues, encontrarse con la Comunidad Mayor —particularmente con fuerzas de la Comunidad Mayor que buscan intervenir en este mundo para sus propios propósitos— representa no solo una gran amenaza para vuestra libertad, sino también un gran impacto en vuestra conciencia, en vuestras creencias y en vuestras suposiciones.
Incluso vuestras creencias sobre Dios tendrán que atravesar un cambio radical, puesto que, lo reconozcas o no, siempre habéis considerado a Dios —o el Origen de toda vida— dentro de un contexto humano. Se cree que [Dios] representa las aspiraciones, las tendencias y los valores humanos.
Algunas veces, esto se transforma en una imagen física de Dios como un ser humano. Pero sea o no este el caso, la gente de la tierra asume que Dios demuestra cualidades y virtudes humanas.
Pero cuando consideras a un Dios de toda la Comunidad Mayor —de esta galaxia y de otras galaxias, que representan a incontables razas de seres que son muy distintos a vosotros, cuyas creencias, valores, apariencia física y estructuras sociales son muy únicas y diferentes a las vuestras— entonces ves la razón por la que existe una barrera psíquica, una barrera de creencias que impide reconocer la presencia de la Intervención en el mundo actual, y ves lo eso que presagia para el futuro y la libertad de la humanidad.
Aunque es cierto que la humanidad tiene aliados potenciales en el universo local, es aún más importante comprender que vuestros primeros encuentros con la vida inteligente no serán con santos ni ambientalistas, sino con exploradores de recursos y colectivos económicos; grupos que viajan buscando ganar acceso a recursos y a planetas de importancia biológica y estratégica.
En cierto sentido, estos grupos son las razas carroñeras, aunque sean tecnológicamente más avanzadas que vosotros y tengan una estructura social muy rígida. Sin embargo, su intención es explorar y explotar, en contraste con lo que hacen las naciones más arraigadas, las cuales han establecido cierto grado de estabilidad, no viajan necesariamente al espacio profundo buscando recursos y mantienen su protección y aislamiento con gran énfasis y discreción.
Las razas carroñeras buscan explorar y explotar todo lo que puedan. Y el hermoso mundo de la humanidad —con su espléndida diversidad biológica, su inmensa importancia estratégica y los valiosos artefactos de su historia ancestral— representa un objetivo y un recurso irresistible para razas como estas. Y hay más de una. De hecho, cada grupo o colectivo está conformado por muchas razas, establecidas en un patrón muy jerárquico.
Así pues, mientras unas pocas personas en el mundo actual sueñan con la gloria y el esplendor del contacto, se están trazando planes, plantando los cimientos y ejerciendo influencias a fin de preparar a la humanidad para que ceda a una mayor persuasión. Esta persuasión promoverá la competencia y el conflicto en el mundo. Fomentará que las naciones luchen y peleen por lo que necesitan y quieren, lo cual recibirá cada vez más atención en un mundo con recursos en declive y una población creciente.
La humanidad es particularmente débil y vulnerable frente a estos tipos de persuasión, debido a que la humanidad está completamente obsesionada consigo misma y las personas tienen muy poca conciencia de la Comunidad Mayor; incluso de que exista una Comunidad Mayor.
Incluso en la actualidad, se está ejerciendo una gran persuasión dentro de ciertos círculos religiosos para que sus líderes, si son conscientes de la realidad de la Comunidad Mayor, se inclinen a creer que los visitantes extranjeros deben ser ética y moralmente superiores a la humanidad.
Está creencia insensata está creciendo en el mundo entre los líderes religiosos, gracias a la esperanza de la humanidad en que debe haber, en alguna parte, una vida mejor que la que experimenta aquí hoy —el deseo de ser salvados, de ser rescatados, de ser guiados, de ser protegidos.
Así pues, hoy tenéis este enfoque en rendirse, en consentir, en aceptar, y por tanto no estáis desarrollando ni aplicando vuestras facultades críticas. Os volvéis menos cauteloso. Os hacéis menos objetivos. Os volvéis menos perceptivos. Sois animados a sumergiros en vuestras propias preguntas y conflictos internos, apartando así vuestros ojos del medioambiente y de vuestro entorno.
Esto no es solo un accidente. No es solo el resultado de una vida próspera. Tampoco la naturaleza humana por sí sola puede explicar este gran cambio en la conciencia y el énfasis humanos.
Incluso aquellos que son cautelosos y observadores están mucho más preocupados por lo que están haciendo o lo que pueden hacer otras tribus de personas. Sin embargo, ¿quién está vigilando vuestra frontera con el espacio? ¿Quién es alentado a observar vuestras fronteras espaciales?
Piensa en los nativos que permitieron que sucediera una intervención. Considera lo que pasó en esos casos. Es una situación que se ha repetido muchas veces en este mundo, e incontables veces dentro de la Comunidad Mayor.
Porque los fuertes dominarán a los débiles si pueden. Esto es cierto aquí en este mundo y también en la Comunidad Mayor.
En el presente, las personas creen que la Comunidad Mayor es un gran lugar vacío que la humanidad explorará y explotará para satisfacer sus propias necesidades. Pero una vez fuera de vuestro sistema solar estaréis entrando en territorios que pertenecen a otros, y los recursos que podríais buscar para vosotros cuando podáis viajar de esta manera serán propiedad de otros.
Pero es improbable que la humanidad llegue a tener ese tipo de contacto o exploración, porque sus primeros encuentros con la Comunidad Mayor serán con exploradores de recursos, con razas carroñeras, con aquellos que buscan aprovecharse de vuestras supersticiones, de vuestra ignorancia, de vuestras obsesiones y de vuestros conflictos internos.
Su objetivo y propósito aquí es ganar acceso a los recursos biológicos del mundo y a la posición estratégica del mundo. Ellos no están interesados en los seres humanos, pues os consideran caóticos, ingobernables y muy inferiores a ellos. Como es costumbre, los conquistadores siempre se sienten superiores a aquellos que quieren subyugar.
De hecho, la Intervención que está operando hoy en el mundo promoverá este sentido de inferioridad. Promoverá que las personas pierdan su conciencia del propósito y el valor de la humanidad. Desalentarán estas cosas. Desalentarán tu autoestima, tu autoconfianza, y tu estima y tu confianza en la familia humana, creando un vacío de confianza que después podrán llenar.
Por tanto, el contacto de la humanidad con la Comunidad Mayor no es un evento del futuro distante, que solo sucederá cuando la humanidad finalmente obtenga la capacidad tecnológica necesaria para viajar al espacio. Vuestra confrontación con la Comunidad Mayor está ocurriendo ahora. No es lo que pensáis. Sois los pobladores nativos de este mundo. Estáis siendo explotados. La Intervención está en marcha y lo ha estado por décadas.
El Nuevo Mensaje de Dios habla de esto, revela esto y advierte sobre esto. Ese es el mayor evento en la historia humana. Representa el peligro y la amenaza más grandes para la libertad y la soberanía humanas en este mundo. Sin embargo, representa igualmente la mayor oportunidad, la mayor posibilidad y también la mayor necesidad para lograr la unión y la cooperación humana.
La unidad y la cooperación son necesarias para evitar un mayor declive de los recursos del mundo, porque si la humanidad pierde su autosuficiencia en la Comunidad Mayor, sin duda perderéis vuestra libertad y autodeterminación. Forzaréis al mundo a tal estado de deterioro que aceptaréis cualquier cosa que la Intervención os ofrezca. No estaréis en posición de negociar condiciones favorables para vosotros.
Porque vuestras necesidades serán opresivas y abrumadoras. Confiaréis en lo que no deberíais confiar, y aceptaréis tecnología que no deberíais aceptar. Concederéis autoridad donde no deberíais concederla, y seréis dependientes de aquellos que proveerán esas cosas que ahora vais a necesitar y que no podéis arriesgar.
Necesitáis la unión y la cooperación humana para evitar un declive aún mayor del mundo, porque ahora vivís en un planeta en declive. También necesitáis la unión y la cooperación humana para defender el mundo. Ahora no se trata de la seguridad nacional. Se trata de la seguridad del mundo entero.
La humanidad da por sentada su posición de superioridad en este planeta. Os beneficiáis y asumís que vuestro lugar en el mundo es un derecho otorgado por Dios, que es incuestionable y que es algo de lo que podéis estar seguros, como si fuera algún tipo de titularidad.
Pero la libertad debe defenderse. Esta libertad y soberanía es rara en la Comunidad Mayor. Hay muchas más naciones que han sido conquistadas y absorbidas por grandes imperios, que mundos que sean independientes.
Para tener independencia y libertad en la Comunidad Mayor, debéis ser autosuficientes, debéis estar unidos y debéis ser extremadamente discretos. Incluido en esto está la necesidad de vigilar y proteger vuestras fronteras, igual que [impedirías] a alguien [que] entrará a tu hogar.
Pero de momento, no se ejerce tal vigilancia. No se practica dicha discreción. No existe todavía la unidad humana. Vuestra única ventaja por ahora es la autosuficiencia, y estáis en el proceso de destruir incluso eso.
Si la humanidad comprendiera su posición en el universo y entendiera la naturaleza de la realidad más allá de sus fronteras, no permitiríais que ningún extranjero pusiera un pie en el planeta sin permiso expreso de la gente de este mundo. Seríais muy cuidadosos con respecto a quién puede entrar aquí y qué puede hacer en este mundo.
Pero en el presente, la Intervención opera a su voluntad. Viaja a su voluntad. Toma a las personas contra su voluntad. Explota a las personas, Cambia a las personas. Destruye a las personas. Es fundamentalmente maléfica.
Algunas personas dirán: «Bien, ¿qué podemos hacer contra estos poderes tan grandes?». Pero la Intervención es pequeña. No tiene una infraestructura militar digna de mención. Se ampara completamente en la creencia y el consentimiento humanos. Depende de su influencia sobre las tendencias y las debilidades de la humanidad. Frente a la fortaleza humana, tiene poca eficacia.
Parte del propósito del Nuevo Mensaje de Dios y su gran advertencia para la humanidad es generar esta fortaleza y esta conciencia. Porque debéis ser extremadamente cautelosos en la Comunidad Mayor, ya que habéis alcanzado una fase de desarrollo en la que otros pueden aprovecharse de vuestra tecnología y de vuestro comercio y comunicaciones globales.
Las razas intervinientes no quieren esperar a que la humanidad obtenga mayor poder tecnológico, pues entonces intervenir aquí se haría mucho más difícil. Por tanto, la gran oportunidad es ahora. La Intervención se intenta aquí, y se intentará, antes de que la humanidad pueda unirse, antes de que adquiera poderes mayores y armamentos mayores y antes de que la humanidad comprenda su propia posición.
Por tanto, como ves, vuestro destino ha llegado. Está aquí ahora. No es una posibilidad futura. No depende solo de la perspectiva que podáis tener. Es la mayor realidad que está ocurriendo en el mundo, y las personas no son conscientes y no están respondiendo.
Si los gobiernos lo saben, no están compartiendo la información que poseen con sus propios ciudadanos. Y los líderes religiosos o son completamente ignorantes, o están siendo persuadidos.
Lo que no podéis ver ahora es lo que representa la mayor amenaza para vosotros. Lo que no reconocéis en vuestra vida diaria tiene el poder de cambiar vuestras circunstancias completamente y para siempre. Porque si la humanidad pierde su libertad y su autodeterminación en este mundo, las posibilidades de que alguna vez las recupere son muy pequeñas.
Para entender el significado, la gracia, el poder y la eficacia del Nuevo Mensaje de Dios y la razón para entregarlo al mundo en este tiempo, debes reconocer la gran amenaza, la Gran Oscuridad que está presente en el mundo.
Debéis revertir el declive del mundo y debéis protegeros de la Comunidad Mayor. Ambas cosas requerirán una mayor unidad y cooperación humana. Ambas cosas son en extremo apremiantes cuando las reconoces.
Porque si el planeta entero pierde su libertad y es subyugado, ¿qué puede ganar cualquier nación de este mundo? y ¿qué ventaja esta podría asegurar para sí misma? Y no pienses que esta subyugación supondría una mejora sobre las condiciones actuales de la humanidad, porque ese sería un error fatal por vuestra parte.
Vuestros gobernantes potenciales no os tratarán mejor de lo que hoy tratáis a vuestros animales domésticos. Ellos no os consideran como sus iguales y no están interesados en vuestras fascinantes cualidades. Y ellos, no entienden vuestra espiritualidad, excepto en la medida en que pueden usarla contra la humanidad para debilitarla, desarmarla y distraerla.
Dichas fuerzas no saben del sagrado Conocimiento que existe dentro de toda vida inteligente, pues si lo supieran no estarían interviniendo en el mundo. No estarían tratando de conquistar y subyugar a la familia humana.
Este sagrado Conocimiento es raro. Que uno obtenga una mayor tecnología no significa que tome conciencia de este sagrado Conocimiento. Solo significa que adquiere una mayor tecnología.
Hay muchas cosas que la humanidad debe reconsiderar y que tú debes reconsiderar, cosas de las que tendréis que tomar conciencia. Pues en este momento tienes grandes reacciones a problemas pequeños, y pequeñas reacciones a problemas que son grandes.
No ves que el destino de la humanidad está determinando todo y lo determinará todo, que la Comunidad Mayor representa el mayor evento en la historia humana, y que este evento requerirá el más alto grado de unidad y cooperación humana que jamás se haya establecido en el mundo, ya que ahora todos estáis en el mismo barco. Ninguna nación tiene ventaja respecto a la Intervención. Todos los seres humanos son recursos para explorar y explotar.
Si puedes contemplar esto, si puedes aplicar una mayor objetividad a tu entendimiento al respecto, comenzarás a ver lo imperiosas y necesarias que son la unión y la cooperación humana. No es solo una buena idea. No es simplemente una virtud. No es solo una manera preferida de funcionar. Esto es necesario para vuestra supervivencia, para vuestra libertad y para vuestro futuro. Así de grande es su importancia.
Considera a los pobladores nativos de este mundo. Un día su vida era como siempre lo había sido durante siglos e incluso milenios. El día siguiente, sin embargo, todo comenzó a cambiar y a colapsar. Y lo que marcó la diferencia entre un día y otro, fue la Intervención.
La Intervención forma parte de la naturaleza. La competencia por el medioambiente forma parte de la naturaleza. No pienses que una tecnología avanzada y compleja eleva a la gente por encima de estos poderes y fuerzas de la naturaleza. Y no pienses que porque la humanidad parece tener una posición preeminente en el mundo y asume que esta preeminencia es permanente, ello significa que tendrá algún poder o eficacia en la Comunidad Mayor.
Incluso vuestros vecinos —que no están interviniendo aquí— no os tienen mucho respeto. Sois claramente destructivos, agresivos y competitivos. Ni siquiera vuestros vecinos —que han visitado este mundo antes para observaros, pero que no están interviniendo ahora— tienen respeto por la familia humana.
Todavía no sois respetables. No sois estables. No estáis unidos. Y tratáis a este mundo —que es un planeta magnífico— de forma insensata y miope.
Ciertamente, las razas que han logrado permanencia y estabilidad en la Comunidad Mayor no se comportan de esta manera. Y todo recurso que todavía poseen en sus mundos es protegido, sostenido y mantenido con gran determinación.
Si puedes escuchar estas palabras, las cuales representan parte del Nuevo Mensaje de Dios, entonces podrás comenzar a ver con ojos más claros, viendo la imagen mayor de tu vida y de la vida de la humanidad. Podrás comenzar a ver la gran fuerza que el Creador de toda vida ha puesto dentro de la familia humana, dentro de cada corazón: el sagrado Conocimiento. Y podrás comenzar a ver el gran problema que la humanidad está creando para sí misma y que también está permitiendo que ocurra aquí.
El Nuevo Mensaje de Dios revelará esto con mucho más detalle, pero debéis ser alertados, debéis ser advertidos y debéis ser preparados. ¿Quién en el mundo puede hacer esto? ¿Quién en el mundo entiende lo que está sucediendo en la Comunidad Mayor? ¿Quién en el mundo sabe quiénes están interviniendo aquí, por qué están aquí, cuáles son sus métodos y qué intentan hacer? ¿Quién en el mundo conoce la historia ancestral de la humanidad y las posibilidades para su futuro?
Sin duda, tal Sabiduría y Conocimiento debe venir de Dios. Porque no hay persona en el mundo que pueda tener ese Conocimiento y esa Sabiduría a menos que lo haya recibido de Dios, a menos haya sido revelado en un Nuevo Mensaje de Dios —no para una persona, no para algún grupo de élite, no para un solo gobierno ni para un líder religioso, sino para toda la humanidad— un Nuevo Mensaje de Dios para la protección y el avance de la humanidad.
Porque lo que se ha proporcionado a la humanidad hasta el momento en los grandes [Mensajes] de Dios no puede prepararos ahora para la Comunidad Mayor. Esta representa una realidad enteramente nueva, un cambio completo en vuestras circunstancias. Esto requiere un Nuevo Mensaje de Dios.
Aunque la sabiduría ancestral está incorporada en todas las grandes tradiciones religiosas, ninguna de ellas puede preparar a la familia humana para lo que debéis hacer ahora. Y es por eso que hay un Nuevo Mensaje de Dios: no para competir con las religiones del mundo, no para eclipsarlas, sino para unirlas y fortalecerlas de manera que su sabiduría ancestral pueda aflorar y servir a la humanidad en sus cambiantes circunstancias, en este gran umbral de su evolución.
Al escuchar estas palabras, tu mente podrá objetar. Tu mente puede cuestionar. Tu mente puede dudar. Tu mente puede comparar y contrastar. Pero en tu corazón, sabrás.
Si no conoces tu propio corazón, entonces no sabrás lo que sabes. Si no sabes y no eres consciente de la sabiduría que Dios ha puesto dentro de ti, entonces no sabrás lo que sabes. Solo serás consciente de lo que piensas. Y esa es la condición de la gran mayoría de las personas en el mundo actual.
Así que, mientras la humanidad enfrenta el mayor reto y el umbral más grande de su historia, este sagrado Conocimiento también está siendo llamado a surgir en muchas más personas. Debe haber muchos más ojos mirando. Debe haber una mayor objetividad. Debe haber una mayor claridad.
Esta sabiduría que Dios ha puesto dentro de ti no está en competencia ni en conflicto consigo misma [dentro de otras personas]. Por tanto, representa la mayor fuerza para la unidad, la paz y la cooperación que es posible en este mundo o en cualquier mundo.
Este sagrado Conocimiento representa una llamada de Dios. Está aquí para guiarte, protegerte y conducirte a una mayor contribución a un mundo en necesidad, y esto satisfará las necesidades de tu alma.
Todavía no conoces las necesidades de tu alma. El mundo debe revelártelas. No busques confort y consuelo. No busques huir y escapar. Porque si lo haces nunca responderás a esas necesidades.
Tus regalos están destinados a ciertas personas en determinadas situaciones. El Conocimiento te llevará allí. El Conocimiento te conducirá allí. No lo harán tus deseos, tus miedos ni tus preferencias. Lo hará el Conocimiento.
Necesitas que este Conocimiento se consume, se complete y satisfaga las necesidades más profundas de tu alma. Y el mundo necesita tu contribución, puesto que sin ella el futuro de la humanidad se hace menos certero y más grave.
La posibilidad para los humanos, para el éxito del surgimiento de la humanidad en la Comunidad Mayor como una raza libre y soberana, dependerá de la contribución de muchas personas. Esta contribución reside dentro del Conocimiento en su interior.
Por tanto, el Nuevo Mensaje de Dios debe proporcionar el camino al Conocimiento y la llamada al Conocimiento. No es simplemente un sistema de creencias que comparar con otro sistema de creencias. No es simplemente una perspectiva o un punto de vista diferente.
No seas insensato pensando así. Esta es la respuesta Y es la respuesta a un problema que ni siquiera habéis reconocido todavía y para el cual aún no estáis preparados.
¿Cuál es el destino humano? El destino humano está en la Comunidad Mayor. Pero debéis sobrevivir a vuestro surgimiento en la Comunidad Mayor. Y, debéis sobrevivir a la competencia de la Comunidad Mayor para ser capaces de funcionar en ella.
El aislamiento de la humanidad ha terminado y nunca lo tendrá de nuevo. A partir de este momento, debéis construir y proteger la libertad y la soberanía humana en este mundo; debéis proteger los recursos de este mundo y vuestra autosuficiencia aquí. Y debéis ganar la sabiduría para distinguir al amigo del enemigo y al aliado del competidor.
Todavía no tenéis esta sabiduría ni este discernimiento, pero se pueden y se deben desarrollar dentro de ti como individuo y dentro de la familia humana en general.
No pienses que la humanidad carece aquí de promesa, pues pensar así implica subestimar vuestro poder y vuestro potencial, y la gran promesa que la familia humana tiene para el futuro, para un futuro que será distinto del pasado.