Practicar la quietud es esencial para experimentar el movimiento más profundo de tu vida y para recibir la guía del Conocimiento dentro de ti, para prepararte para un mundo sometido a un gran cambio. Aquí irás bajo la superficie de tu mente para experimentar niveles de pensamiento más quietos, o sin pensamiento alguno. Esto es extremadamente restaurador y rejuvenecedor. Existen cuatro elementos importantes para construir una práctica de meditación de este tipo.

Primero, es importante practicar en un lugar tranquilo sin distracciones ni interrupciones. Dedica, si es posible, un pequeño lugar en tu hogar para este propósito y realza este ambiente para apoyar tu práctica.

Segundo, necesitas estar cómodo físicamente mientras prácticas. Aunque estarás sentado para estás prácticas, encuentra una silla confortable o cojines para apoyarte.

Tercero, necesitarás abordar tu práctica con una actitud pasiva. Eso significa que estas en un relajado estado de mente, sin intentar obtener cosas como percepciones o respuestas. Tú estás intentando lograr un estado de quietud o meditación.

Por último, necesitarás algo en que enfocar tu mente para que no esté constantemente deambulando. Puedes hacerlo siguiendo tu respiración o pronunciando en silencio una palabra o sonido sin significado. Si tu mente comienza a deambular por pensamientos o recuerdos, gentilmente tráela de vuelta a tu respiración o tu sonido. Mantén tu atención. Usando tu respiración o ese sonido, con el tiempo, te llevarás a la experiencia de niveles más profundos y más sutiles de la mente, como un guijarro hundiéndose en una piscina profunda. Aquí estás entrando en el ámbito del Conocimiento, más allá del alcance del intelecto.

Así que, para comenzar, toma tiempo y ve a tu espacio dedicado a la práctica. Apaga tu teléfono y cualquier otro aparato que pueda interrumpir tu tiempo de práctica. Siéntate cómodamente en una silla o en el suelo. Toma una serie de respiraciones profundas para relajarte. Cierra tus ojos y comienza a enfocarte en tu respiración o en un palabra o sonido. Puedes seguir naturalmente tu respiración o puedes pronunciar una palabra en silencio. En el estudio de Pasos al Conocimiento, se recomienda el sonido Na Rahn. Aquí suavemente dices para ti NA al inhalar y Rahn al exhalar.

Sigas tu respiración o pronuncies un sonido como Na Rahn, lo importante es que permanezcas con ello. Tu mente intentará deambular, llamando imágenes o problemas, recuerdos o preocupaciones. Cuando continúes, se volverá más fácil practicar la quietud, y te encontrarás a ti mismo experimentando un estado muy relajado, pero alerta. Si inicialmente encuentras que tiendes a dormirte, está bien. Eso significa que puedes tener una pronunciada necesidad de descanso.

Con el tiempo, no te dormirás, sino que alcanzarás un estado de meditación, que realmente será más plácido que dormir.

Se paciente al aprender a meditar. Podrí llevarte meses establecer está práctica. Veinte minutos de meditación, dos veces al día, traerá enormes recompensas. Estudiar Pasos al Conocimiento te dará una base sólida para construir esta y otras prácticas que profundizaran tu experiencia.

Aquí estás haciendo un viaje bajo la superficie de tu mente hacia profundos estados de consciencia. Estás construyendo una fuerte conexión al Conocimiento, una conexión que permanecerá contigo en todas las circunstancias. Eso te dará fortaleza, claridad y certeza en los próximos tiempos cada vez más inciertos.