¿Cuál es el propósito humano?


Como le fue revelado a
Marshall Vian Summers
el 21 de septiembre de 1993
en Boulder, Colorado, Estados Unidos

Texto original: What is Human Purpose?

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Lo que estás leyendo en este texto es la transcripción de la voz original de la Asamblea Angélica hablando a través del Mensajero Marshall Vian Summers.

Aquí, la comunicación original de Dios, que existe más allá de las palabras, es traducida al lenguaje y el entendimiento humanos por la Asamblea Angélica que supervisa el mundo. La Asamblea después entrega el Mensaje de Dios a través del Mensajero, tras lo cual es transcrito y puesto a tu disposición y a disposición de todos.

En este extraordinario proceso, la Voz de la Revelación está hablando de nuevo. La Palabra y el Sonido están en el mundo. Que puedas ser el receptor de este regalo de Revelación y puedas estar abierto a recibir su Mensaje único para ti y para tu vida.


Greater Community Spirituality
Volumen 2 > Espiritualidad de la Comunidad Mayor > Capítulo 5

El propósito es algo que entenderás a medida que subas más alto en la montaña de la vida. A medida que alcances un punto de observación mayor, entenderás más del viaje en sí, mirando hacia atrás y siendo cada vez más capaz de anticipar lo que está por delante. El propósito se descubre haciendo el viaje, no estableciendo para uno mismo una explicación o una definición favorable o fascinante. El propósito no es una justificación. Él no compensa por nada. El propósito es algo que está aguardando a que lo descubras. Tú solo puedes descubrirlo haciendo el viaje, siguiendo el camino, aprendiendo sobre la marcha y ganando el entendimiento y la perspectiva más amplia que uno adquiere a medida que madura en el Camino del Conocimiento.

Como hemos dicho anteriormente, tú has venido de cierto lugar y retornarás a ese lugar. Has venido portando regalos para el mundo. Tu propósito mayor está incorporado en esta idea. A causa de tu origen y tu destino, tienes algo más grande que dar al mundo, algo que el mundo no puede darte. Tu regalo está oculto dentro de ti como un cargamento secreto, pero no puedes acceder a él hasta que hayas avanzado. Entonces comenzará a emerger, lenta y gradualmente, por su propia cuenta.

El impaciente, el ambicioso, el apasionado y el fanático no pueden viajar por este camino, pues ellos no pueden permanecer en un viaje más grande. No pueden estar sin definiciones o explicaciones, porque son demasiado inestables para hacerlo.

Tu llamada en la vida es muy específica. Ella implica involucrarte con ciertas personas por razones específicas en ciertas coyunturas de tu vida. El propósito mayor que tú compartes con todos es mantener el Conocimiento vivo en el mundo y traer al mundo algo de tu Antiguo Hogar. Esta es una definición con la que puedes permanecer, porque ella no te limitará ni te engañará, pero no vayas más lejos en tus definiciones. Permite que la manifestación de tu propósito tome lugar de manera natural, tal y como hará si sigues el Camino del Conocimiento. Tu propósito ahora es prepararte para ganar una mayor comprensión del mundo, de la evolución del mundo y del destino del mundo. En este contexto mayor alcanzarás una nueva posición estratégica desde la que entender tu papel en el mundo y tu razón para venir aquí.

Tu vida debe ser cumplida. Debe ser justificada. El mundo es un lugar difícil al que venir. No es un lugar de vacaciones. No es un lugar al que eres enviado como castigo. No es un lugar al que eres enviado por placer. Es un lugar que necesita tus regalos de tu Antiguo Hogar, y por esta razón has venido. Tus regalos son muy específicos, y pueden ser entregados sin hacer un gran espectáculo. Excepto en raras ocasiones, tú no recibirás aclamación, gloria o fama por dar tu regalo. Esto es apropiado. Si pudieras obtener una mayor comprensión del mundo y de lo que el mundo realmente es, de lo que el mundo realmente necesita y de cuál es su apuro, verías qué gran ventaja es esta. Entenderías por qué los Sabios permanecen ocultos y por qué deben aprender a proceder así incluso para hacerse sabios.

El Creador trabaja en todos los lugares y en todas las dimensiones, reclamando a los separados mediante el Conocimiento. El trabajo de Dios se lleva a cabo entre bastidores, aunque es activo y bastante evidente si puedes percibirlo. Este trabajo no hace un espectáculo de sí mismo, y por tanto recibe un mínimo de resistencia y contaminación de los mundos y las culturas a las que sirve.

El Conocimiento es así. Trabaja entre bastidores. No necesita reconocimiento. No necesita glorificación. No necesita que te inclines ante él como un esclavo. Sin embargo, te llama a responder y a abrir a él tu mente y tu corazón, de manera que puedas reunirte con el aspecto mayor de ti mismo que te vincula a toda la vida en todas partes. Como un padre llamando a un niño díscolo de vuelta a la familia, él te llama a volver. Te llama a casa, y a medida que progresas hacia él, no importa cuán inconscientemente, él te protege y te guía. Aunque la mayoría de sus regalos pasan desapercibidos y son ignorados, su presencia y su beneficencia descienden pese a todo sobre ti.

Encontrar esta Gracia dentro de ti representa parte de tu preparación. Tu propósito ahora es prepararte. No es hacer definiciones maravillosas para tu vida. No es justificar tus errores. No es hacer que todo se sienta bien o luzca bien. Sin preparación, tu propósito no puede ser descubierto. Hay muchas formas de preparación. Todas ellas vienen de más allá de ti. Si tú estableces tu propio camino, te perderás. Si eliges solo lo que te gusta y desdeñas el resto, entonces te quedarás donde estás, perdido en tu propia mente, ocultado de la vida y aislado del mayor movimiento de la vida al que en verdad has venido a servir y en el que has venido a participar.

Tu propósito no es escapar del mundo. Tu propósito no es correr a casa con tu Creador. Tu propósito es dar lo que has venido aquí a dar, reunirte con aquellos con los que has de reunirte y contribuir todo lo que has traído contigo —ese cargamento secreto que portas incluso en este momento—. Tu propósito comienza con la preparación. Esto te lleva hacia el descubrimiento y la contribución. Mientras tanto tú das. Estas grandes etapas representan los hitos en tu desarrollo. No pienses que tú ya estás preparado, pues la preparación es mucho mayor de lo que concibes. Y la preparación continúa.

Tú estás aquí en el mundo por razones muy específicas. Estas no son tus razones personales. Estás aquí para contribuir y participar en un mayor orden de realidad que existe dentro del mundo y más allá del mundo, e incluso más allá de la manifestación física de la vida. ¿Cómo puedes determinar qué es? Si tú tuvieras acceso y entendimiento sobre todas las cosas, entonces tal vez podrías ver y definir tu propio papel dentro de él. Sin embargo tú no puedes hacer eso, por tanto no lo intentes, porque te engañarías a ti mismo de la peor manera posible.

Tu propósito ahora es prepararte. Si tú debes aprender Conocimiento y Sabiduría de la Comunidad Mayor, entonces debes prepararte en el Camino del Conocimiento de la Comunidad Mayor. Tú no puedes hacerlo por ti mismo. Y si recibes el currículo, no lo alteres; no lo edites; no selecciones lo que te gusta desechando el resto, o no te moverás más allá de donde estás. Llevarte a una mayor consciencia requiere una comprensión diferente y un movimiento diferente en la vida. Con una mayor consciencia viene una mayor capacidad. Todo esto viene del Conocimiento. Aquí se te pide que sigas, que respondas y que aprendas las grandes lecciones en discernimiento, discreción, comunicación y afinidad. Estas lecciones son inherentes en la propia preparación. Desde el primer paso hasta el último, tú estarás aprendiendo estas cosas, y la vida será tu laboratorio.

Date cuenta de que esta preparación no es solo para ti. Es para permitirte contribuir tus regalos de modo que puedas completar tu servicio en el mundo y retornar a tu Familia Espiritual. Aquí tú retornas con tus regalos entregados, con todo contribuido, sin que quede nada por hacer. Esto representa el verdadero logro. Cuán pocos en el mundo pueden identificar esto y reclamarlo para sí mismos. Para comprender realmente tu propósito, debes tener una comprensión de lo que es Dios, de lo que es el mundo, de lo que es la fuerza vital y de lo que es el Conocimiento.

El principio de la preparación es un proceso de deshacer. Mucho de lo crees, mucho de lo que admiras, mucho de lo que no puedes tolerar y mucho de lo que resientes debe ser apartado para que tengas la oportunidad de tener una experiencia nueva y directa. Esto no es un proceso de añadir a tu pensamiento y a tus conclusiones anteriores. Por tanto, no vengas buscando validación. En su lugar, ven buscando educación. La educación, por su propia naturaleza, está diseñada para llevarte a nuevo territorio, para llevarte más allá de tus límites y presunciones anteriores y para exponerte a nuevas ideas y experiencias. Esta es la esencia misma de la educación, y esto es lo que nosotros queremos decir cuando decimos que primero debes prepararte.

Sin preparación no conseguirás nada. Esto es obvio en muchas otras áreas de tu existencia en el mundo, y es igualmente cierto también en esta área. Mucha gente busca, o afirma que busca, mayor Sabiduría, mayor entendimiento y mayores relaciones, pero pocos se prepararán. Algo en ti debe motivarte a prepararte y debe moverte a prepararte más allá de tus preocupaciones y tus ansiedades y más allá de tus preferencias, tus dudas y tus miedos. Confía en esto. Esto viene del Conocimiento. El Conocimiento te traerá al Conocimiento. Tus objetivos, tus ambiciones, tus aspiraciones, tus fantasías y tus sueños solo pueden estorbarte en esta gran vuelta a casa.

Cuando llegas a comprender que tu propósito no es solo para ti, comprenderás que no debes permitirte obsesionarte o estar absorto contigo mismo. En efecto, la gran liberación es una liberación de este estar absorto contigo mismo, lo cual te devuelve a la vida con una mente abierta y con todas tus facultades completamente activadas. Aquellos que están poseídos consigo mismos no pueden ver más allá de sus propios estados mentales, sentimientos, pensamientos, emociones, actitudes cambiantes, creencias fijas, etc. ¿Qué pueden traer al mundo sino su propia confusión y su propio aislamiento? Tu primera libertad es la libertad respecto de tu propia mente. Esta es la libertad respecto de tu pasado, el cual representa tu mente en este momento. Esta es tu mente personal; no es la Mente Mayor del Conocimiento. Es la mente que el mundo ha condicionado. Es la mente que tú debes utilizar ahora de una manera nueva.

El Conocimiento te da un respiro de la prisión de tus propios pensamientos y actitudes y de los límites de tus propias emociones y creencias. Esto lo hace sin destruir tu mente; lo hace sin dañarte de ninguna manera. El Conocimiento te da una nueva experiencia, una experiencia en el tiempo presente, sin asociaciones pasadas. Tener esta experiencia forma parte de tu preparación. Aquí debes estar dispuesto a ir más allá de tus ideas. Aquí debes estar dispuesto a estar sin conclusiones ni ideas fijas acerca de que es el mundo, acerca de qué eres tú y acerca de qué es la verdad.

Para muchos esto es muy difícil. Tú puedes sentirte bastante inseguro cuando entras en estos estados de desconocimiento, pero en realidad esto es un regreso a la claridad dentro de ti. Esto es estar sin respuestas pero con una mente abierta e inquisitiva. Esto no es una aproximación pasiva. Es muy activa, porque aquí debes estar muy atento, muy centrado y listo para actuar.

A menudo, cuando la gente habla de propósito habla del resultado final en lugar del proceso de alcanzar ese resultado. Esto, por supuesto, carece bastante de significado y no tiene un valor duradero. La gente afirma lo que cree que es ahora o lo que cree que será, y considera que esto es una definición y una declaración de su propósito.

No te engañes a ti mismo con estas fantasías. Aquellos que tendrán éxito son aquellos que centran su vida en su preparación y permiten que el curso de sus vidas se despliegue sin determinar su resultado y sin determinar a qué se parecerá, cómo será, etc. Aquí tú debes desarrollar una gran creciente fe en ti mismo, en la beneficencia de aquellas personas que te asisten, en los Invisibles que te guían y te ayudan y en el poder y la presencia del Conocimiento dentro de ti. Sin esta confianza no puedes empezar, y no serás capaz de continuar. Sin embargo, debido a que estas son realidades vivas para ti, tú puedes continuar y debes continuar. Pero debes dejar atrás tu necesidad de autoafirmación y autovalidación.

Tú estás entrando en un nuevo territorio. No sabes lo que ello significa. No sabes cómo va a ser. No sabes qué ocurrirá a continuación. Esto es estar abierto a la vida. Esto es estar presente a la vida. Esto es estar sin presunciones. Aquí la mente puede integrarse a sí misma verdaderamente en el tiempo presente y escapar de la prisión de sus pasadas asociaciones.

Nosotros te damos mucho ánimo para que comiences la preparación en el Camino del Conocimiento. Para aprender el Conocimiento y la Sabiduría de la Comunidad Mayor, te damos mucho ánimo para que comiences el Camino del Conocimiento de la Comunidad Mayor, el cual es una preparación específica para aquellos cuyo propósito reside en comprender el contexto mayor de la vida y el movimiento mayor del mundo. Tú sabrás si esto es para ti. El Conocimiento iniciará tu preparación y la reafirmará en tiempos de duda y en tiempos de falsa confianza en los que crees que has alcanzado algo.

El propósito es un proceso; no es una definición. No es una validación. No es una forma de confortarse a uno mismo. Es algo que te está esperando. Es un gran viaje. Es una puerta que está abierta ahora para ti, una puerta por la que tú puedes pasar. Es un viaje en el que no necesitas conducirte a ti mismo solo, sino que en su lugar te haces parte de una mayor educación que existe por todo el universo. El Creador está en activo en todas partes, reclamando a los separados mediante el Conocimiento. Esto es el propósito del Creador. Tu propósito es dar lo que tú estás diseñado para dar, de acuerdo a tu naturaleza y tus verdaderas habilidades. En esto, tu vida se vuelve realizada porque todo lo que has hecho puede ahora servir a un propósito mayor.

Este viaje requiere una autohonestidad extraordinaria. Esta espera a ser aprendida. No es algo que tú poseas en este momento. Humildad, honestidad, apertura, discernimiento, comedimiento, discreción, tolerancia y compasión —estas son cualidades que resultan de la preparación y el avance en el Camino del Conocimiento—. Estas cosas son las que proveen inspiración y verdadera habilidad en la vida.

Esto es propósito. Propósito es entrar por la puerta en la que comienza un viaje mayor en la vida, y permanecer en ese viaje en tiempos de felicidad y en tiempos de angustia. Esto es propósito. Deja a un lado todas las magníficas definiciones y todas las gloriosas imágenes espirituales. Esto es material para la fantasía de la gente que no puede hacer el camino, que no puede emprender la subida a la montaña, que permanecerá abajo hablando sobre sus alturas y su magnificencia, pero sin tener realmente modo alguno de conocer su realidad.

Tu propósito es el mismo que el de todos los demás. Sin embargo, tu llamada es específica. Es un conjunto específico de tareas con gente específica y en relaciones específicas para ciertos propósitos. Esto es una llamada. Pero para que una llamada sea genuina, real y dé verdaderamente fruto en la vida, debe estar basada fundamentalmente en el propósito mayor que tú compartes con todo el mundo.

¿Cómo sabes si estás involucrado en una verdadera preparación? Lo sabes porque estás entregándote a algo que no puedes controlar y no puedes entender, pero que encuentras cada vez más beneficioso a medida que avanzas. Esto es muy concreto, pues mucha de tu preparación es muy concreta. No es deambular por ahí ciegamente, especulando y teniendo grandes ideas. En cambio, es involucrarse en un proceso de desarrollo que ha sido provisto para ti por tu Creador y tu Familia Espiritual, para iniciarte en esta vida a la llamada y propósito mayores para los que has venido. Solo mediante este descubrimiento será tu vida plenamente justificada y plenamente comprendida. Aquí tú entrarás en un mayor rango de relaciones y comprensión, el cual hará de ti una persona de increíble valor en el mundo.

El mundo es un lugar hambriento y solitario. Está repleto de fantasía e insensatez. Su sufrimiento es profundo. Su confusión es honda. Su violencia es escalofriante. Sus posibilidades son grandes. ¿Quién puede ver estas cosas sino aquellos que comprenden que han venido desde más allá del mundo para dar algo? Ellos comprenden esto porque es algo que pueden sentir. No es una emoción; es algo que sienten. Ellos sienten que han venido aquí por una razón. Es algo que aún no pueden definir, pero tampoco pueden hacerlo desaparecer. Algo mayor les está llamando. Esto es propósito. Eventualmente, si responden a esto, ellos comenzarán su preparación. Esto es propósito. Si permanecen con su preparación y avanzan en ella, sin tratar de alterarla o cambiarla, ellos comenzarán a ganar una mayor percepción y comprensión. Esto es el propósito. Si continúan y no caen presas de la falsa percepción de que son avanzados, entonces el Conocimiento germinará lentamente dentro de ellos, y su percepción y comprensión de las cosas cambiará. Su consciencia del misterio de la vida se hará más y más profunda, y su capacidad en la vida —en sus relaciones, en su carrera, en todas sus actividades— se profundizará. Esto es propósito. En cierto momento, ellos se darán a algo que implica a otra gente en servicio al mundo de una u otra manera, de acuerdo a su naturaleza y su diseño. Para ellos será natural darse de esta manera, tal y como será para ellos antinatural el declinarlo. Esto es propósito.

Según describimos este proceso de preparación de una manera muy general, no pienses que tú estás cerca del final. No clames que tú estás en cierta parte del proceso pues, ¿cómo podrías decirlo? Tú no puedes sacarte a ti mismo de la vida y examinar tu vida. Tú no tienes todavía esa perspectiva ventajosa. Acepta que el viaje es grande. Es maravilloso. Es a veces difícil. Pero en todos los casos él te refina. Él se lleva lo que no es esencial en ti y revela lo que es permanente y significativo. Tu verdadero propósito y llamada se hace evidente cuando todo lo que lo oculta y lo disimula cae y queda lo que es verdadero, siendo esto bienvenido y abrazado.

Tu gran impedimento aquí es tu miedo a lo real y tu anhelo de fantasía. La realidad no es dura; es redentora. No es cruel; es revitalizante. No es aplastante; es restauradora. Esta es una realidad de una naturaleza mayor de lo que tus ojos perciben y tus manos pueden tocar. Es una realidad que te vinculará no solo a la vida en el mundo sino también a la vida en la Comunidad Mayor. Ella te preparará para tus encuentros con aquellos de la Comunidad Mayor. Para ti y para tus hijos estos encuentros crecerán en alcance y magnitud. Qué pocos estarán preparados, pero estos pocos deben estar preparados, porque ese es su propósito.

Tú no necesitas sentir una afinidad con la Comunidad Mayor o incluso creer en ella para llegar al entendimiento de que tu propósito está relacionado con ella. El propósito de todo el mundo está relacionado con ella, directa o indirectamente, porque este es el mundo que todos habéis venido a servir. Este es el momento en el que estás aquí, y esta es la condición del mundo y la evolución del mundo en este momento. Aunque pueda parecer que tu llamada específica tiene poco que ver con la Comunidad Mayor, tú estás sirviendo al mundo en su emergencia a la Comunidad Mayor. Tú estás promoviendo la bondad, la Sabiduría y la realidad del Conocimiento en el mundo mediante tu propia demostración. Este es tu propósito.

Ven, pues, sin definiciones. Ven, pues, sin la necesidad de autovalidación. Ven a la puerta abierta del Conocimiento. Este te espera ahora.